No sé si la ciudad hará honor a su nombre. Felipe y Pilar andan recorriéndola y enviándome fotos de rascacielos, edificios raros de no sé qué arquitecto que diseñó Brasilia, parques... Pero a mí, la que más me ha gustado ha sido ésta. Un gato brasileño de Belo Horizonte en un parque. Un gato de lo más común, que podría ser el mío, aunque el mío no tiene esas rayas. "Tantos miles de kilómetros, para quedarse con un gato, después de todas las fotos que le hemos mandado"-pensarán Felipe y Pilar. Pues sí, no sé si es el gato o las palmeritas que lo acompañan y que me recuerdan a Elche, pero me quedo con esta foto, debo de ser así de rara. :D
domingo, 19 de febrero de 2006
Belo Horizonte.
No sé si la ciudad hará honor a su nombre. Felipe y Pilar andan recorriéndola y enviándome fotos de rascacielos, edificios raros de no sé qué arquitecto que diseñó Brasilia, parques... Pero a mí, la que más me ha gustado ha sido ésta. Un gato brasileño de Belo Horizonte en un parque. Un gato de lo más común, que podría ser el mío, aunque el mío no tiene esas rayas. "Tantos miles de kilómetros, para quedarse con un gato, después de todas las fotos que le hemos mandado"-pensarán Felipe y Pilar. Pues sí, no sé si es el gato o las palmeritas que lo acompañan y que me recuerdan a Elche, pero me quedo con esta foto, debo de ser así de rara. :D
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15 comentarios:
A mi también me gusta ese gato. Y Tristán, klaro!
Kuriosamente, hoy mismo he tenido una diskusión muy frustrante kon mi madre a kuenta de lo de tener gato...
¿Qué le vamos a hacer? Donde hay patrón, no manda marinero. No hay forma de convencer a tu madre, ¿eh? No sé, se me ocurre que, a lo mejor, te puedes hacer voluntario de alguna asociación protectora de animales e ir allí una tarde o dos a la semana a dar de comer a los animales, sacar a pasear a los perros por los alrededores...
Pues es una foto preciosa :)
Me gusta más que los rascacielos (lo siento, Felipe y Pilar, pero es así).
Curioso, las mujeres casi siempre se fascinan por los gatos y en menos ocasiones por los perros. En cambio, aunque a los hombres les gusten los perros, poca o ninguna vez los he visto fascinados por los gatos.
Pero por supuesto, no he descubierto nada nuevo.
Hola Ana...a mi me encantan los gatos también aunque ahora no tengo porque vivo en un departamento :(
Lo de Brasilia es increíble...pero entre eso "TAN" moderno y otros lugares mas antiguos o medievales me quedo con lo segundo.
No soy de edificios ni rascacielos.
Aca te doy una pagina de Oscar Niemeyer, el arquitecto que hizo de Brasilia esa ciudad tan moderna!
http://www.epdlp.com/arquitecto.php?id=120
Podes ver algunas fotos también.
Ya te mostrare fotos de mis gatos en Argentina
Saluditos
Más vale el gatito -me encantan los gatos- que todos los rascacielos del mundo. Hay que volver a lo esencial. Slds. E.
HENRY: Muy buenas, veo que has vuelto y eso después de la resaca del fin de semana, que tiene más mérito (ya he leído tu blog). Pues es verdad que parece que a los hombres les gustan más los perros que los gatos, pero aquí tenemos a dos ALUCARD y EGOSUM que también les gustan. Y mi hermano fue el que trajo a casa al mío, si bien es cierto que su novia estaba delante y, a lo mejor, quiso impresionarla, no sé...
ANAVI: Tú sabes de todo, hija mía, de cocina, de música, de hablar por la radio, de fiestas exóticas en India, de Irlanda, de Argentina, de Suecia, del arquitecto de Brasilia... ¡Eres un pozo de sorpresas! Era Oscar Niemeyer, sí, me lo dijo Pilar en el e-mail de ayer con una foto de la iglesia de San Francisco de Pampulhas, que también hizo este hombre en Belo Horizonte. Pero me gustó más la del gato que me había mandado su marido en un e-mail previo porque sabe que me gustan los gatos.
EGOSUM: Saludos a ti también, ¿has hecho hoy una paella de esas buenas? Sí, cualquier bicho viviente, gato, perro, humano, incluso araña, mejor que un rascacielos.
Bueno, haremos las presentaciones, aunque sea al final (no soy buena anfitriona, parece, tenía que haberos presentado antes): EGOSUM y HENRY PLUS son de Valencia (España), ALUCARD y MAHAYA de Madrid (España) y ANAVI de Argentina, pero vive en Suecia.
ahhhh un gatito!!!!
a mi un gatito me dejó un rasguño en la nariz cuando tenía apenas yo unos 10 años, el gato debe haber tenido mas y no deben haberle gustado mis morisquetas... puesto que nos enfrentamos a una lucha de miradas prolongadas, mientras él muy altanero se retorcía en las piernas de su dueña y yo, le sacaba la lengua... cual paciente felinito, esperó hasta la hora de despedirnos de su dueña, y solo me sintió cerca que me hizo
" Miaaauuuuuuu,!!!! dando un zarpazo a mi nariz, supongo que su traducción fue" toma niña malcriada"... desde entonces, me gustan los gatos como este... de lejos e inmoviles.... INOFENSIVOS.
ja, ja...
Muchos besos domingueros mi niña...
¡Ja,ja! Ese gato ya te creó un trauma gatuno para el resto de tu vida... ¡Qué vengativo! La verdad es que yo a veces también prefiero al mío en foto que en realidad, pero luego viene en plan mimoso y ya nos reconciliamos.
Tengo una cibervecina!jeje
Enkantado de konocer a todo el mundo.
Mas o menos ya habia echado un vistazo a los blogs de los ke vamos komentando x aki.
1saludo a todos
Sí, lo que pasa es que, con lo grande que es Madrid, igual cada uno vivís en una punta. :-) Por cierto, CIELOAZZUL, que ha comentado después, es de México.
Esperá que te envien fotos de Ouro preto.
Aunque los gatos son algo especial que sobrepasan arquitecturas y artes varias.
Esto me ha hecho pensar en una vieja peli. Creo que era "Un hombre y una mujer", donde un personaje plantea a otro: Si se estuviera incendiando El Louvre, y tuvieras posibilidad de salvar un cuadro, y cuando vas rescatándolo, apareciese un gato, qué salvas?
Yo conozco muchísimos hombres que aprecian los gatos.( los felinos, aclaro por los argentinos que puedan leerme;))
Aunque Oscar Niemeyer sea un arquitecto muy creativo, lo que hizo con Brasilia es criticable.
Las opiniones están muy divididas. Viviendo en Brasil la visité varias veces, a mí me parece un engendro deshumanizado.
Un beso Amelche.
La verdad es que me lo pones difícil... Entre un gato y un cuadro del Louvre, no sé, no sé... Y menos mal que ya no está la Dama de Elche allí, si no, ¡más dilema!
La vida, siempre la vida...
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